De vuelta en casa

Hace una semana que estamos de vuelta en Guinea. Ya acomodados en el horario y continuando con la vida en esta zona del mundo. La casa al encontramos bien así como los guardias y la Sasha, nuestra perra. La gente por acá esta contenta de vernos regresar ya que estaba medio incierto si volvíamos o no. Despacio vamos desempacando las cosas que vamos necesitando, pero no todo ya que estamos todavía en la búsqueda de una nueva oportunidad de trabajo a donde Dios nos mande. Emily comenzó su escuelita “Playschool” el lunes, esta yendo dos veces por semana por la mañana. El Mathy y Gissy hoy se vuelven a juntar con el grupo de madres y bebes.
El lunes a la mañana fue mi primer día entero de trabajo. Salí a las 6 de la mañana a Goroka, una ciudad a unos 400 Km de acá para unas reuniones con las otras ONG Internacionales que operan en Nueva Guinea. El viaje nos llevo a través del valle fértil de Mackham para luego empezar a subir la montaña, hacer pico a las 2,000 metros y bajar a Goroka que esta a 1,600 metros sobre el nivel del mar. La ruta de la montaña es famosa por la cantidad de asaltos que se producen debido a que el camino es muy sinuoso y hay que ir despacio. Por suerte y con la protección de Dios no nos paso nada a nosotros. El clima allí como se pueden imaginar es bastante diferente al de la costa y hasta pase un poquito de frió con manga corta durante la reunión que tuvimos en un quincho afuera de la oficina de Save the Children. Luego de la reunión estuve un rato en la oficina provincial que ADRA tiene en Goroka ordenando algunas cosas para después regresar a Lae. El martes fue mi primer día en la oficina. Inauguré el año echando a uno de los contadores de ADRA y al jefe de Operaciones también, los dos por robar dinero… no fue el mejor de los comienzos de año.